El 40% de los conductores que fallecieron habían consumido alcohol o drogas. Beber tres o más cervezas hace que el conductor conduzca con una tasa de alcohol superior a 0,60 mg/l, que está tipificado como un delito contra la seguridad vial.
Uno de los problemas a los que tienen que hacer frente las autoridades encargadas de la seguridad vial es el de los conductores reincidentes. Evidentemente todas las conductas reincidentes no tienen la misma repercusión en la siniestralidad vial, pero algunas como la conducción bajo los efectos del alcohol o drogas sí que tienen trascendencia en este aspecto.
En España, negarse a realizar la prueba de alcoholemia conlleva graves consecuencias tanto por vía administrativa, según la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, como por vía penal, de acuerdo con el Código Penal.