El pasado miércoles 11 de noviembre se publicó en el BOE un Real Decreto por el que se modifica el Reglamento General de Conductores, en el que se transpone una Directiva (2003/59/CE) que permite la conducción con un permiso de la clase B con una antigüedad superior a dos años, de automóviles sin remolque impulsados por combustibles alternativos destinados al transporte de mercancías con una masa autorizada superior a 3.500 kg pero que no exceda de 4.250 kg, siempre que cumplan determinados requisitos.
La moto es un vehículo que puede resultar de lo más práctico si pretendemos desplazarnos por carretera o ciudad. Este medio de transporte resulta eficiente y competitivo en comparación con el coche, su bajo coste, la facilidad para aparcar y los tiempos de recorrido así lo demuestran.