Aumenta el consumo de drogas y los controles de la DGT
Existen dos tipos de controles: el carácter administrativo y la sanción penal.
En el primero, si la policía intercepta a un vehículo en un control preventivo y el conductor está bajo los efectos de las drogas, éste será sancionado con una multa económica de 1.000 euros más la retirada de seis puntos en el carnet de conducir. Además, el vehículo será inmovilizado por los diferentes agentes de seguridad.
En el caso de que el conductor realice una actividad temeraria poniendo en peligro la vida de terceras personas, y éste haya ingerido drogas, se considera delito penal. La pena de prisión oscila entre los tres y los seis meses, además de imponerle una multa económica de seis a doce meses y el derecho a privarle en el ejercicio de conducción entre uno y cuatro años.
La Dirección General de Tráfico (DGT) advierte del incremento del 49% en el número de conductores fallecidos durante 2015 con presencia de drogas en el organismo. Este porcentaje es superior si se compara con la del año anterior donde un 38% de los conductores fallecidos había consumido drogas.
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